Agentes de la Policía Nacional han detenido a un varón que transportaba un supuesto cuadro de Leonardo da Vinci con un permiso de exportación caducado. El arrestado fue interceptado en el puesto fronterizo de Modane (Francia) portando la pintura en el interior de su vehículo. En el permiso de exportación constaba que estaba valorada en 1.300.000 euros y que su destino final era la ciudad italiana de Milán. El cuadro fue trasladado al Museo Nacional del Prado donde se llevó a cabo un análisis que determinó que se trataba de una imitación realizada con una posible intención fraudulenta.
La investigación dio comienzo en el mes de julio del año 2022 cuando los agentes recibieron, a través de los canales de cooperación policial internacional, la información de que el servicio aduanero francés había localizado una obra pictórica que estaba siendo exportada desde España. El cuadro era transportado por un varón con destino a la localidad italiana de Milán.
En el permiso de exportación de la obra constaba, conforme con la catalogación realizada por el solicitante y los datos por él aportados, que había sido realizada por Leonardo da Vinci, que su título era “Retrato Giacomo Trivultio” y que su valor ascendería a 1.300.000 euros.
Ante la posibilidad de que se tratase de un fraude, los agentes comprobaron a través del Ministerio de Cultura que el permiso de exportación era auténtico pero estaba caducado desde hacía varios meses por lo que se trataba de una exportación ilegal. Por estos hechos, un varón fue localizado y detenido en Madrid como presunto autor de un delito de contrabando.
Posteriormente los policías de la Brigada de Patrimonio Histórico trasladaron la pintura a España desde el puesto fronterizo de Le Perthus en Francia. Una vez en nuestro país fue depositado en el Museo Nacional del Prado donde se llevó a cabo su análisis y estudio técnico. El informe de los expertos recogió que la obra se trataba de una imitación de los modelos de retratos milaneses de finales del siglo XV y principios del siglo XVI y que había sido realizado con intención fraudulenta probablemente a principios del siglo XX. De esta manera, su valor económico era de entre 3.000 y 5.000 euros y quedaba completamente descartada la autoría de Leonardo o la de cualquiera de los artistas italianos de su época.