Una nueva pasarela conectará Aranzadi y la Txantrea en el entorno de la calle Vergel

Gerencia de Urbanismo aprobará este miércoles el proyecto básico de la nueva pasarela sobre el río Arga que conectará Aranzadi y Txantrea y que reurbanizará también el entorno de la calle Vergel, incluido el puente. La futura pasarela peatonal y ciclista tendrá casi cien metros de longitud y generará en ambas orillas espacios de estancia que unirán el parque fluvial del Arga con el nuevo rediseño más sostenible de la calle Vergel y con la nueva urbanización de Txantrea Sur.

Parte del puente del Vergel se renaturalizará para crear un eje sostenible desde el parque del Runa hasta la pasarela e incrementar los flujos peatonales y ciclistas. Actualmente, el diseño del puente, con dos carriles por sentido de circulación, está sobredimensionado y con una conexión a la calle Vergel muy brusca. El proyecto genera un trazado más lógico y lo completa con una mayor amplitud para nuevas zonas peatonales y ciclistas que, desde el puente hasta la nueva pasarela, contribuyan a un espacio más paseable y más seguro. 

El proyecto ha tenido en cuenta la fluidez de los tránsitos tanto peatonales como del tráfico rodado y el máximo respeto al arbolado, con mínimas afecciones en la actuación en el glacis, y a las estructuras preexistentes. Por ello, en gran parte del diseño se plantean trazados curvos y sinuosos que se deslizan entre el arbolado o los edificios existentes y que respeten al máximo el entorno natural del meandro de Aranzadi y las dependencias del Centro de Educación Especial El Molino y la residencia El Vergel. El proyecto básico incluye modificaciones en el cruce de las calles Vergel y Labrit con un nuevo acceso a El Molino, más amplitud en el nudo viario y la reubicación de pasos peatonales.

El proyecto básico que se aprobará se basa en la propuesta realizada por Raúl Escrivá Peyró e Iriarte Mariñelarena Arquitectos Urbanistas SLP, adjudicatarios del contrato para la redacción del proyecto y, en su caso la dirección de obras, licitado por la Gerencia de Urbanismo por un importe de 164.580,57 euros. Este proyecto ha tenido en consideración las indicaciones señaladas tanto por la Dirección General de Cultura – Institución Príncipe de Viana, como por la Confederación Hidrográfica del Ebro. No obstante, previa a la aprobación del proyecto de ejecución, necesitará a autorización preceptiva. El presupuesto de la obra recogido en el proyecto básico asciende a casi 7 millones de euros.

Puente y calle del Vergel
Uno de los sentidos del puente del Vergel, el que dirige a Rochapea, eliminará el tráfico rodado. En ese nuevo espacio se priorizará a peatones y ciclistas en un entorno que se renaturalizará con el objetivo de que funcione como un bulevar sostenible que comunique el parque del Runa, el parque del meandro de Aranzadi y la nueva pasarela sobre el Arga. La circulación de vehículos, por tanto, se reducirá a un carril por sentido, en lugar de los dos carriles por sentido actuales, con la necesaria adaptación de los accesos desde la plaza de Pompeyo.

La reducción de carriles conllevará modificaciones en el actual trazado de la carretera de la calle Vergel. Será necesario ocupar una pequeña parte del glacis, de la zona verde, para que el trazado de la vía a la salida del puente evite las sinuosidades existentes ahora y tenga un diseño más lógico, tal y como ya contemplaba el Plan Municipal. En definitiva, la nueva carretera ganará unos metros hacia la zona verde para ampliar al otro lado el espacio de carril bici y conexión peatonal que llevará hasta la pasarela. 

Esta solución minimiza la afección visual de la nueva carretera desde el glacis ya que desde su parte superior prácticamente no se visualizará el nuevo trazado viario. A su vez, los parterres que se intercalan en el nuevo eje peatonal permitirán ampliar la visión vegetal prolongando la percepción del entorno naturalizado junto a las murallas. Al desplazar el recorrido peatonal al norte (al trazado de la actual carretera) y dotarlo de un mayor espacio se permitirá generar una zona desde la que se pone en valor el entorno amurallado al disponer de unas mejores vistas en las que los elementos vegetales se intercalan para reducir el impacto del viario.

Conexión peatonal con el Casco Antiguo y nuevo acceso a El Molino
La conexión peatonal con el Casco Antiguo se llevará a cabo mediante rampas que intercalarán zonas verdes de manera que se integren en el glacis como un camino con escasa presencia visual y no se perciba como una acera o elemento urbano en continuidad con el viario. Las rampas se separarán del límite de la carretera, de modo que se dé continuidad al glacis hasta el nuevo paso de peatones previsto en el tramo final del puente del Vergel. Los pavimentos y elementos de esa conexión peatonal con el Casco Antiguo se plantean en piedra o en la solución que Príncipe de Viana considerase más adecuada. El proyecto mantiene la actual conexión con la carretera de acceso al portal de Francia y al Casco Antiguo.

Justo en la curva y enfrentado a la punta del baluarte inferior de la muralla, el espacio peatonal configura una pequeña plaza que sirve para recibir la conexión de la pasarela y para resolver el nuevo acceso de las instalaciones del Centro de Educación Especial El Molino. Esta nueva pequeña plaza resuelve también el acceso al edificio de la parcela del Vergel que se usa como centro de jóvenes, generando un patio inglés frente al mismo que permita el acceso por los huecos de su fachada sur.

Cambios en el cruce con Labrit
Por último, la reurbanización de la zona llegará hasta el cruce con la calle Labrit, con una solución que mantiene todo el arbolado existente sin afectar al glacis. Se desplaza la acera que baja desde el centro de la ciudad, integrándola como un camino de parque. De ese modo, se aprovecha parte de la actual acera para ampliar el nudo viario, mejorando la visibilidad y funcionalidad de la solución. 
La nueva disposición del cruce plantea a su vez modificar el actual acceso al Centro de Educación Especial El Molino, desplazándolo, para así alejarlo del cruce. Eso permite que se cree un carril exento en el giro a la derecha desde Labrit a Vergel cuando se circula desde Txantrea, sin necesidad de llegar al actual cruce. Ese nuevo trazado obliga a desplazar la posición de los pasos de peatones actuales alejando en este caso el embarque del de la calle Labrit de la traza del actual junto al camino existente desde el crucero del puente de la Magdalena.

En la zona, se plantea a su vez la ejecución de un camino elevado que comunique la plaza del crucero con la nueva posición del paso de peatones eliminando la actual acera y el camino existente (que no cumple con criterios de accesibilidad), de manera que se renaturalice al máximo el entorno conectándolo a través del nuevo camino que discurriría de modo aéreo entre los árboles salvando el pequeño desnivel existente y cumpliendo a su vez las exigencias de accesibilidad. Se conseguiría de este modo dar continuidad al recorrido del Camino de Santiago por un entorno muy naturalizado y que discurriría entre el arbolado existente.

Pasarela de Aranzadi
La nueva pasarela peatonal y ciclista de Aranzadi tendrá una superficie curva de 95 metros de longitud que dará continuidad a los carriles peatonal y ciclista que unen los barrios de la Txantrea, a la altura de la rotonda de Irubide, con Rochapea en el entorno de la calle del Vergel y y con los caminos del parque fluvial en el meandro. 

Como criterios de diseño, se ha apostado por una solución atirantada de dos mástiles, de acero cortén y cables de acero galvanizado, que permiten reducir el canto y salvar el nivel del agua.  Los dos mástiles potencian la idea de continuidad longitudinal de la pasarela armonizando su escala con su entorno. La propia forma de cada conjunto de mástiles y tirantes recrea la idea de un gran portal de acceso tridimensional por el que se atraviesa en su recorrido, tanto en bici como andando, desde y hacia los distintos caminos. 

El trazado curvo de la pasarela se adapta tanto en alzado como en planta a los condicionantes de la obra, marcados por las curvas de inundabilibidad y las afecciones a espacios del Centro de Educación Especial El Molino y de la residencia El Vergel. La pasarela tiene las mismas características que el recorrido perimetral exterior del parque de Aranzadi. Sigue y completa su trazado curvo hasta la calle del Vergel, utilizando el mismo pavimento de hormigón lavado del parque con una barandilla de corten con diseño de evocación vegetal.  En su diseño, se separan los usos entre el recorrido peatonal y el carril bici mediante una jardinera que naturaliza ambos caminos, con un banco unido en la parte central que salva el río. 

Las conexiones a los caminos de acceso se hacen igualmente de manera fluida y directa, sin obstáculos ni quiebros que dificulten la entrada. En la margen izquierda, en la zona de Txantrea, se creará una plaza trapezoidal que entronque el desembarco de la pasarela con la acera peatonal a la altura de la rotonda. En la otra orilla, en el entorno del molino de Ciganda se generará también una pequeña plaza que sirve para enlazar y recibir la solución peatonal desde la calle Vergel.