El músico y cantante oñatiarra Ruper Ordorika Ezkurdia (Oñati, 1956) recibirá el Premio Abadia de este año, en un acto que tendrá lugar el próximo 12 de septiembre en el palacio Abadia de Hendaia (Lapurdi). De este modo se reconocerá el trabajo y la gran contribución realizada por el compositor oñatiarra durante cuatro décadas a favor de la creación y la cultura en euskera. "A través de su música y su voz, bebiendo de fuentes diversas, ha abierto la canción vasca a nuevas fronteras, creando así un universo propio, siempre desde el euskera y en euskera. Esta trayectoria que sigue en marcha de hito en hito, ha permitido ofrecer a la lengua y a la cultura vascas, al propio pueblo del euskera, un rico y irreemplazable referente creativo y cultural", ha destacado Garbiñe Mendizabal, directora foral de Igualdad Lingüística de la Diputación Foral de Gipuzkoa.
"Tomó el testigo de la nueva canción vasca y la llevó a nuevos territorios, en aquellos primeros discos publicados en la década de los 80. Desde entonces, en el amplio abanico entre la canción y el rock, ha dado al euskera infinidad de canciones y melodías nuevas. Tanto en solitario como en grupo, ha fusionado el rock y la canción tradicional, ha colaborado con músicos internacionales y de aquí, creando puentes con la literatura y el arte y participando en innumerables iniciativas culturales", ha explicado Mendizabal. Ha añadido que las "propuestas significativas e innovadoras que ha lanzado, la pasión que ha mostrado por cuidar y enriquecer el proceso creativo y la lengua en todos sus trabajos", sitúan a Ruper Ordorika entre los "principales referentes" culturales vascos en las últimas décadas.
Por todo ello, la Dirección Foral de Igualdad Lingüística ha propuesto la concesión del Premio Abadia a Ruper Ordorika por su "abundante e inagotable" aportación al euskera y a la cultura vasca, y así lo ha ratificado la diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza. El acto de entrega del premio se celebrará el próximo 12 de septiembre en el propio Palacio Abadia de Hendaia, en homenaje al científico y promotor del euskera que da nombre al galardón.
Ruper Ordorika Ezkurdia nació en Oñati en 1956. Aficionado a la música desde siempre, con doce años se mudó a Gasteiz. Durante su etapa de estudiante en la capital alavesa y, posteriormente, en la Universidad de Bilbao, participó en diversas iniciativas, entre ellas la principal, en la creación del colectivo Pott Banda, que posteriormente tendría una gran relevancia en la trayectoria del cantante. Allí se encontró con amigos y amigas con los que en adelante iba a mantener una relación tan fructífera: Bernardo Atxaga, Joseba Sarrionandia, Joxemari Iturralde.
Su primer disco Hautsi da anphora (Xoxoa-Elkar, 1980) obtuvo ya muy buenas críticas, aunque abordara nuevas formas con respecto al mundo de la canción vasca hasta entonces. Este disco estaba compuesto por poemas tomados del libro Etiopía de Atxaga (Pott, 1978). Desde entonces, Ordorika ha desarrollado una amplia y variada discografía en colaboración con músicos vascos e internacionales. Muchos de esos discos son trabajos elaborados bajo el influjo de sus estancias en Londres, Nueva York o Cuba, así como de la huella de la canción tradicional vasca. Como muestra de ello, junto a su carrera en solitario, formó en 1994 el grupo Hiru Truku, junto a Bixente Martinez y Joseba Tapia, en el que trabajó nuevas formas de interpretación de canciones antiguas. Bakarka bi es el último trabajo que ha publicado y en él, como su título indica, ofrece en solitario algunos de los trabajos más conocidos de su trayectoria.
"Modelos representativos" Mendizabal ha anunciado que, en esta edición, el Premio Abadia iniciará una nueva etapa con el objetivo de dar importancia y un nuevo espíritu tanto al propio premio y, por tanto, a los valores que se premian, como a su reconocimiento público. De hecho, este premio cumplirá 25 ediciones el año que viene –con el que se entregará a Ordorika, ya se ha concedido en 24 ediciones–. Una nueva etapa que buscará prestigiar aún más el Premio Abadia y darle mayor relevancia institucional. "Ofreciendo un reconocimiento público a la labor de personas, proyectos y asociaciones ejemplares en la revitalización del euskera, ofrecemos modelos representativos a la propia lengua y a la comunidad de hablantes", ha señalado Mendizabal. La Dirección de Igualdad Lingüística ya está trabajando en la normativa que dé forma a esta nueva idea o meta.
Teniendo en cuenta la destacada aportación de Anton Abadia Urrustoi como promotor del euskera, la Diputación Foral de Gipuzkoa eligió en 1996 su nombre para establecer el premio al reconocimiento a la actuación de personas o asociaciones destacadas en trabajos a favor de la normalización del euskera. Así nació el premio Abadía, que desde entonces se ha concedido cada dos años o cada año. Arrasate Euskaldun Dezagun, Dionisio Amundarain, Karmele Esnal, Juan Zelaia, Juanba Berasategi, Imanol Urbieta, Joxerra Gartzia, Ixa Taldea, Kike Amonarriz, Ibon Sarasola o Arantxa Urretabizkaia son algunos de los nombres conocidos que han recibido el premio con todo merecimiento. En las dos últimas ediciones se ha reconocido el trabajo realizado por el grupo Fagor y la asociación Garabide a favor del euskera. Además, el acto de entrega del Premio Abadia ha sido también un lugar de encuentro de asociaciones y agentes del ámbito del euskera durante todos estos años.