El Gobierno regional ha dado luz verde al proceso para fusionar la Fundación del Centro del Envase y Embalaje (FCEE) y la Fundación para la Transformación de La Rioja (FTLR). La integración de la FCCE en la FTLR, que ha incorporado a sus estatutos los fines de la primera, permite aunar esfuerzos y recursos en la gestión de los fondos europeos, ganar eficiencia, racionalizar el sector público, simplificar trámites, evitar duplicidades y mejorar la transparencia y la seguridad jurídica. Además, esta fusión potenciará la acción económica, social, científica y tecnológica de la Rioja.
El Ejecutivo riojano considera que la absorción es la mejor opción para la continuación y desarrollo de los fines complementarios y de las actividades totalmente análogas y relacionadas de ambas entidades frente a otras alternativas, tales como la conversión de la Fundación del Envase a otra forma jurídica ajena a una personificación fundacional, como una sociedad o empresa pública por ejemplo, teniendo en cuenta el carácter carente de lucro de la figura fundacional, y que las entidades objeto de fusión ya están constituidas (la FTLR en abril de 2021 y la FCEE en diciembre de 2021). Asimismo, la integración garantiza la viabilidad y continuidad de las actividades que venían desarrollando ambas fundaciones, así como el cumplimiento de los objetivos fundacionales a largo plazo.
También promueve y fomenta la coherencia y coordinación de recursos y las sinergias de los trabajos y cometidos que ambas entidades desarrollan actualmente, optimizando así su gestión. La fusión no causa un perjuicio en relación a la composición del patronato de la FCEE, ya que los respectivos patronatos cuentan con una composición y miembros idénticos -todos ellos cargos de la Administración General de la Comunidad Autónoma de La Rioja (concretamente, todos son miembros del Consejo de Gobierno de la Comunidad Autónoma, junto al presidente)-, con la única salvedad de que el patronato de la FTLR tiene un miembro más: el titular de la consejería con competencias relacionadas con la cultura y el turismo.
Por otro lado, la fusión de ambas entidades abunda en la configuración de un sector fundacional autonómico más reducido, simplificado, racional y eficiente dentro del actual contexto de optimización y necesidad de control de los recursos públicos, todo ello bajo los principios de eficiencia y economía, y ello sin suponer perjuicio a la actividad de control que se ejerce sobre las fundaciones públicas en relación, a título de ejemplo, en ámbitos como el control presupuestario y económico o el régimen de contratación.
Además, con la fusión de estas dos entidades de la misma naturaleza jurídica y cometidos, y actividades afines y similares, se logra una mayor eficacia y agilidad en la gestión de los fondos europeos sin suponer un quebranto o perjuicio en sus planes y compromisos adquiridos con otras instituciones. La integración también permite aunar esfuerzos y medios humanos, simplificar el aprovisionamiento de recursos materiales y la contratación de proveedores de servicios externos, y evitar duplicidades o solapamientos de acciones.