El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy las bases de la convocatoria de ayudas a entidades de iniciativa social sin ánimo de lucro en el ámbito de los servicios sociales de Gipuzkoa, a las que van a destinarse este año 1,46 millones de euros. “Mediante estas subvenciones anualmente respaldamos el trabajo que realizan muchas entidades del tercer sector, que es un activo importantísimo que nos diferencia como territorio, y uno de los principales pilares de nuestro modelo de políticas sociales. En un momento en que emergen nuevos desafíos sociales, vamos a seguir fortaleciendo su rol para adaptarnos con garantías al escenario actual”, ha explicado la portavoz foral Irune Berasaluze.
Así, la Diputación ha realizado un exhaustivo análisis de las bases para orientarlas en la dirección establecida por el Plan Estratégico, que tiene el bienestar integral de todas las personas como principal prioridad, marcando el rumbo de la institución. La convocatoria de 2024 constará de 4 líneas de trabajo: programas de intervención social con personas, familias, grupos y comunidades -960.000 euros-; programas de sensibilización y prevención hacia determinadas situaciones y problemáticas sociales -244.000 euros-; proyectos de investigación e innovación en caracterizar necesidades sociales emergentes y formas de atención social -60.000 euros-; y transformación digital y modernización tecnológica -200.000 euros-, esta última novedosa respecto a años anteriores.
Los programas a impulsar deberán enmarcarse en promover el bienestar social del conjunto de la población que tengan como objetivo promover la autonomía personal y prevenir y atender las necesidades personales y familiares derivadas de la dependencia y de la discapacidad y prevenir y atender las necesidades originadas por las situaciones de desprotección y exclusión, así como las necesidades personales y familiares originadas por las situaciones de emergencia.
En el caso de la línea de transformación digital, además de la adquisición de dispositivos digitales, se apoyará la realización de estudios o similares que tengan como objeto la transformación digital, así como la formación de sus integrantes en este ámbito. Cada entidad podrá recibir hasta 6.000 euros de ayuda. Además, se ha incrementado el importe -de 40.000 a 60.000 euros- destinado a la línea de ayudas para la realización de proyectos de investigación e innovación ligados a nuevas necesidades sociales, con la intención de valorizar las actuaciones innovadoras. Los criterios de valoración se han detallado con mayor exhaustividad, y en ellos se reconoce la “vital aportación” del trabajo que realizan las voluntarias y voluntarios de Gipuzkoa en las entidades del ámbito de los servicios sociales que forman parte de la sociedad civil.
Las nuevas bases se publicarán la semana del 22 de julio. Las entidades podrán presentar sus solicitudes a través de la sede electrónica de la Diputación Foral y podrán hacerlo hasta el 9 de septiembre. “Vivimos en una sociedad cada vez más envejecida, plural y compleja, en un contexto que nos plantea grandes retos sociales y nuevas realidades como la soledad no deseada, la salud mental, la cronificación de situaciones de exclusión o pobreza… En Gipuzkoa tenemos un tejido asociativo modélico y partiendo de esa fortaleza, de esa energía solidaria, desde la colaboración y la innovación, queremos garantizar el bienestar de todas las personas que puedan encontrarse en una situación de vulnerabilidad”, ha señalado Berasaluze.
El año pasado se atendieron peticiones de 275 asociaciones y se apoyaron un total de 338 iniciativas, con ayudas por valor de 1,38 millones: 181 en la primera línea, 85 en la segunda, 9 en la tercera y 63 en la cuarta. La tipología fue muy diversa. Por ejemplo, en los programas de intervención social, se subvencionó un programa de intervención en residencias, gestionado por la asociación sin ánimo de lucro Algaraklown, con un equipo de clown profesional estable apoyado por personas voluntarias y liderado por la directora artística de la asociación. Las beneficiarias del programa subvencionado fueron personas mayores ingresadas en centros de la tercera edad, así como familiares y acompañantes. A pesar de las diferencias, todas estas personas tienen en común la vivencia de un cambio radical en sus vidas, alteraciones en las facultades físicas o psíquicas, alejamiento del entorno familiar y una progresiva sensación de soledad.
En la modalidad de programas de sensibilización, fue subvencionado el programa de ciclo de conferencias sobre el autismo que la asociación Gautena organiza todos los años, y en el que participan profesionales del sector para tratar diversos temas relacionados con el Trastorno del Espectro del Autismo (TEA). El objetivo es sensibilizar acerca de la necesidad de gestionar los apoyos personales necesarios para que cada persona con trastorno del espectro del autismo o con discapacidad intelectual y/o desarrollo, y su familia, puedan disponer de las oportunidades adecuadas para alcanzar una calidad de vida plena en una sociedad favorecedora de la inclusión.
Por último, en la línea 3, recibió ayuda económica el proyecto presentado por Zabalduz Koop Elkartea, para el análisis de nuevos modelos de acogida. El proyecto consiste en identificar e investigar diferentes modelos de acogimiento secuencial innovadores e indagar posibilidades de implantación en el sistema de protección. Por un lado, analizan modelos de acogimiento secuencial innovadores en la Eurorregión, y su aplicabilidad. Asimismo, se pretende recoger la opinión, necesidades e inquietudes de las personas menores atendidas, familias y profesionales de cara a la aplicación de este modelo de acogimiento que alterna la presencia entre el hogar familiar y el recurso correspondiente.